10 de septiembre de 2013

Se hunden barcos

La mirada curva

Es en los tiempos más crudos cuando la radio se hace más que necesaria; la radio libre, social, comunitaria; sin ánimo de lucro; ese lucro que hoy día está por encima de todo. Incluso del espíritu olímpico, al que enmascara de "una oportunidad única", sostenible y próspera para los intereses de todo un país.

Bien nos gustaría que los Juegos Olímpicos fueran eso. Pero, como escribía Inés Sabanés en ElDiario.es, "la viabilidad importa".

"Deuda, corrupción, recortes… y 'rescate' es una combinación demasiado peligrosa". Las consecuencias de una economía "de casino" y de los "despilfarros" han sido (y pueden ser) demasiado severas, y los costes pueden ser demasiado altos como para dejar el futuro de todos en manos de unos pocos. Y con trabajo precario y temporal (si no voluntariado) poco vamos a prosperar.

Los Juegos Olímpicos no iban a paliar la crisis; esta crisis embustera que justifica los recortes en Sanidad, Ciencia o Educación; las tasas en Justicia; o los despidos y las bajadas de sueldos.

No podemos olvidarnos de toda la gente que ha tenido que salir de este país en busca de una oportunidad. No se van a aprender idiomas, o a vivir una experiencia en el extranjero. Se marchan porque, pese a lo que diga el ministro de Hacienda, España no es "el gran éxito económico del mundo" (infoLibre).

Hay que tener la cara muy dura para decir algo así. Pero más aún, para añadir que somos "un fenómeno inédito", "el ejemplo del mundo", y que nunca se habían creado en la historia tantos puestos de trabajo como ahora...

Cuando la cifra de parados roza los seis millones, podría parecer que la desfachatez de Montoro no  encuentra comparación; pero sí la tiene. Su desfachatez es comparable a la de Cospedal... o a la de Floriano; a la de Báñez... o a la de Mato; a la de De Guindos... O incluso a la de Cifuentes. Por citar sólo a unos pocos.

Pero toda desfachatez es poca cuando se trata de Mariano Rajoy. Porque él es el presidente de todos ellos, y aunque no lo parezca, también el nuestro.




Se hunden barcos, se marcha la gente. Ya lo cantan León Benavente.

No hay comentarios: